Los Héroes de Julio. Crónica III Vick Gómez Miller

LOS HÉROES DE JULIO. Crónica III Vick Gómez Miller

Alma del Movimiento 26 de Julio. Combatiente que nunca dudó de la victoria y jamás cejó en sus empeños: Fidel Castro Ruz.
Hombre de las causas justas, quien acompañara a la campana de La Demajagua en el tránsito de Manzanillo hasta La Habana, junto a veteranos de las guerras del 95 y militantes del Partido Socialista Popular.
En este joven serio, inmenso, van sobre sus hombros los más altos empeños. El ataque a los cuarteles Moncada en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo es su idea. Nada lo detendrá hasta ver a la Patria liberada.

Abel Santa María Cuadrado, honrado, respetuoso, sensible, tenaz. Marcha junto a Fidel hacia Santiago de Cuba para asaltar al cuartel Moncada. Allí le corresponde combatir desde el Hospital Civil, y allí consume hasta la última bala de su arma. Ante la desesperación de Haydée y Melba las conmina: “Hay que dar una orden: la de saber morir, porque el que sepa morir va a vivir” Luego el horror. La tortura bestial. Pero con su infinita hidalguía calla. Le arrancan un ojo para que denuncie a sus compañeros, como si cegándole le quitaran una luz que lleva ya encendida para siempre.

José Luís Tassende de las Muñecas. Inquieto, presente en las tareas cotidianas que hacen grande a la Revolución . Ortodoxo, patriota , sencillo. Su casa desde los primeros días es local conspirativo. Allí acuden Fidel, Raúl, Abel, Ñico López, Chenard.
El 26 de julio recibe varios impactos de proyectiles. Tiene destrozada la rótula. Le fotografían y el pueblo le ve herido, sentado en el suelo, recostado de una pared. Esta vivo en esos instantes. Luego le asesinan.
Raúl Gómez García. Patriota muy joven de frente despejada. Poeta. . Estudia y trabaja . Lee a Martí. Rebelde contra todas las injusticias. Sabe muy bien lo que quiere. El es seguidor de Rubén Martínez Villena el Secretario del Partido Comunista a quien los pulmones enfermos no de derriban en la necesidad de: “Una carga para matar bribones: Para acabar las obras de las revoluciones” Raúl Gómez García verso y fusil en el nido superior de la gloria.