jueves, 20 de mayo de 2010

El Padre Nuestro.Navarro Luna.Opiniones sobre el poeta.

Opiniones:
Carlos Rafael Rodríguez: No hay ahora en Cuba quien pueda equipararse a usted en intensidad humana.

Juan Ramón Jiménez: Gran poesía la suya,donde la increible riqueza de imágenes corre aparejada con una musicalidad augusta y resonante

Enrique José Varona:A un poeta de verdad como usted,no le celebro los versos; los leo y los siento.

Raúl Roa:Aunque no es este el lugar para expresar mi opinión sobre Surco, debo decirle que es algo muy serio, A propósito de él , intentaré a la medida de mis fuerzas, una como revisión de nuestros valores poéticos de vangurdia, para situarlo a usted en el sitio que incuestionablemente le corresponde: en la vanguardia.

Pablo Neruda:Te escribo bajo la impresión inmediata que me causó la lectura de su hermosa y justa Elegía. Hermosa por los sucesivos hallazgos poéticos, verdderamente
asombrosos, y justa pues traduce con maestría y hondura insuperable el más legítimo y torrencial dolor humano.

Nicolás Guillén: Por eso la Revolución, que es tema constante en su poesía, anunciada, prometida, cantada por él,adquiere en Navarro, como en ningún otro poeta-salvo Martí-un asento desgarrador,en una escala que comienza con la protesta y termina en la imprecación...Aunque los años pasen y amontonen los siglos, su voz resonará impetuosa. Marcará uno de los momentos más altos y más profundos de la lírica cubana.

Rafael Alberti:
Navarro Luna, como hombre y como poeta, se ha ubicado en el meridiano actual del
mundo y del tiempo.

Cintio Vitier:Cuba entera está en sus poemas,vibrando poerosamente erguida, desde los guerreros sensitivos de nuestro siglo XIX hasta los fabulosos libertadores de hoy. Cuba está integra en su palabra y en su gesto de gran poeta.

Estas son algunas de las muchas opiniones de grandes poetas e intelectuales de ssu tiempo.Interminable sería seguir mencionándolos:Bonifacio Birne,Henri Barbusse,José Portoglo,Carlos Pellicer,Emilio BallagaLeón Felipe,Juana de Ibarborous, Juan Chabás,José María Chacón y Calvo,Eugenio Florit,Roberto Fernández Retamar,Jes´sus Orta Ruíz,Juan Marinello,Rómulo Gallegos,Félix Pita ,Alberti, Juana de Ibarbourou, entre otros.

" Padre Nuestro " (28 de Enero de 1953)

Homagno generoso,
Padre nuestro...!
La Patria fina,
dulce,
transparente y radiante;
la Patria fuerte,
sin amos y sin yugos;
la Patria cristalina y pura;
la Patria honda,
honrada,
próspera,
feliz,
respetada
y amada...
La que forjó la sangre y el metal de tu sueño...!
"La Patria con todos y para el bien de todos"
la tendremos un día...!
Sí, Padre, la tendremos...!
La tendremos...!
Aún trbaja tu sangre;
aún los latidos de tu pensamiento
resuenan en la sombra desvelada;
aún sentimos el fuego
de tu espíritu los surcos anhelantes;
aún la campana de tu frente,
con la opulenta voz de sus relámpagos,
socava la negrura cómplice del silencio
podrido y tenebroso; aún tu palabra ardiente
cruza como una ráfaga de soles,
como los pasos firmes e inflamados del viento;
como un tumulto de banderas libres;
como una llama de clarines jóvenes;
como una aurora resonante de libertadores aceros...!
Padre,
Padre Nuestro...!
Todo lo que tú ves,
todo lo que estás viendo,
toda la podredumbre que se muestra a tus ojos;
la carroña infernal que se arrastra viviendo;
que no quiere la estrella porque ilumina y mata:
pero sí el yugo para uncirse al yugo
porque con él se goza; los miserables cuerpos
que huyendo de la estrella la traicionan
cada vez más hundidos en la infamia. Los negros
estandartes del lodo; la rica y ancha avena
y la caliente paja;...Los caminos abyectos
que erige la conciencia de la sombra y el crimen...
¡todo esto
lo verás derribado por la estrella iracunda,
encendida en los hombros de tu pueblo...!
¡La misma estrella que lució en tu frente
ya tú de pie en el yugo,
Padre Nuestro!
Delante de las rojas,
de las abiertas y hondas heridas de tu sueño;
los nobles oriflamas se abatieron
como als destruidas, se alza el pecho
de la infinita luz que aún conduce tu frente
para quemar los cercos de la muerte, los cercos
del mal y del oprobio...¡Ya veremos
derribadas las sombras; y los viles,
los que a la Patria dolorida hundieron
en la deshonra y en el fango, todos
arderán en la llama, en el terrible fuego
que derrama la estrella.
Padre Nuestro...!
Estas columnas lívidas de llanto;
estos charcos de horror donde los harapientos
niños están jugando con las lágrimas;
esta Patria con amos y estos hombres famélicos,
(campesinos que esperan, tan sólo, la injusticia
que ha de venir, al cabo, a arrojarlos al medio
de los caminos, Padre...! (¡Tantos libertadores
a quienes ha robado su tierra el extranjero...!

Estas rosas de espanto;
estas vertientes frías del hambre,
y el desprecio
a los propios hermanos, a los hermanos negros...!
Como si alguien pudiera ser más grnde que Antonio,
el Capitán tremendo
que a punta de coraje, de vergüenza y de sangre
la Patria libertó, para que en ella
sembrarán sus latidos los blancos y los negros...!
Detrás de esta tiniebla dilatada;
de este cáliz de horror, de los horrendos
paisajes de la muerte, se alza el monstruo:
el que tus ojos vieron
y en cuya entraña tu viviste..!El monstruo
impedrialista que extrangula a los pueblos
desunidos y débiles, entregados por cómplices
del invasor, vendidos a los treinta dineros
que Judas recibió! La Patria nuestra,
traicionada agoniza en el madero;
pero sabe que tú no la has abandonado
y que tu propia voz y tu propio denuedo
están en la batalla final, mientras tus sienes
delirantes alumbran el redentos sendero.

¡Padre!
Padre Nuestro...!
Qué larga esta agonía...!
Qué grves y profundos sufrimientos..!
Qué sangrientas caídas...! Qué cobardes traiciones...!
Qué asechanzas sombrías y que golpes arteros...!
Qué pozos y qué espumas infernales...!
Qué corrientes de sombras y de cieno...!
Pero sobre la sangre, sobre el dolor,sobre la muerte,
con nuestros propios doloridos pechos
y ayudados por tí, de pie en el yugo
alzaremos la Patria, la alzaremos
ya libfre de traciones,
por encima de todos los oscuros acechos;
forjada por tu sangre que nos guía;
por la esperanza en filos,de tu;
forjada por tu luz inacabable...
¡Homagno generoso
Padre Nuestro!

Tal vez la obra poética de Manuel Navarro Luna un día no muy lejano vuelva a
ser publicada y puesta a la venta en las ferias del libro. Lo veremos un día,
sí Padre, lo veremos!








Padre Nuestro...

!

La Patria fina,
dulce,
transparente y radiante;
la Patria unida y fuerte

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