¡QUÉ LINDA ESTABAS AQUELLA TARDE! vgm

¡Qué linda estabas aquella tarde!
La despedida fue inevitable.
Yo nunca supe que raro hechizo
mudo testigo de nuestra angustia
torno las nubes de un gris plomizo.

¡Qué linda estabas aquella tarde!...
que nuestras vidas
tomaban rumbos desconocidos
sin que existiera nuestra alborada.
Y sin embargo se que por siempre
andaremos juntos
aunque sigamos sendas lejanas.

Acaso el tiempo borre el recuerdo
y hasta me olvide que te adoraba
y tu presientas que en nuestras almas
un sueño amable nos acompaña
de aquel cariño que era la gloria
y aquel orgullo de tu mirada
y yo me diga viendo el pasado:
¡Qué linda estabas aquella tarde!