Versos y Décimas de Vick Miller

Tu Nombre.

Desde mi corazón que ya no es mío
se desliza tu nombre en un torrente
y la vida se extingue lentamente
bajo el agobio de tu gesto frío.

Desde mi corazón surge el hastío
como una incertidumbre diferente
y tu voz agradable que me miente
se difumina en el umbral sombrío.

Desde mi corazón sin un latido
tu nombre se me escapa del olvido
como una indefinible clarinada.

Y a veces me obsesiona la certeza
de pensar si el amor y la tristeza
son del mismo color que tu mirada.

PARA LA MAESTRA INTERNACIONALISTA. Vick Miller

Tu eres así igual y diferente
y te quiero en orgullo porque has sido
lo real de un ensueño compartido
que en un hijo prolonga su simiente.
Te quiero porque tienes del presente
renuevo proletario que nos viste
el valor que en tu pecho siempre existe
cuando llama el clarín de la epopeya
y entonces te reencuentro en cada estrella
y en toda la ternura que me diste.

Te quiero así distante y tan cercana
porque del corazón nunca te has ido
y te escribo sabiendo que has partido
a entregar a otro pueblo su mañana-
Te escribo y me recuesto en la ventana
para no verte y verte en cada escuela,
en milagro de amor que me consuela
la soledad de tu figura ausente
y en mi carta a tí voy como si un puente
nos tendiera entre Cuba y Venezuela

La Muerte del Hijo de Mi Amigo.

Mi amigo me confesó:
ayer falleció mi hijo.
Con tanta pena lo dijo
que el dolor me conmovió.
Perdóname, me pidió,
no he querido que se enteren.
Tu sabes como se quieren.
Y en verdad le comprendimos.
También nosotros morimos
cuando nuestros hijos mueren.

Entonces le pregunté,
acercándome, muy bajo:
¿Qué haces hoy en el trabajo?
¡Ve a llorar al que se fué!
Amigo, yo no me iré,
sabes que soy locutor
y no autoriza el dolor
callar a los radio escuchas
que si las penas son muchas
la Radio es el propio honor.